sábado, 31 de diciembre de 2016

2016: SIN ENTRENADOR NO HAY PROYECTO

El año 2016 ha sido bastante alocado para el Real Betis Balompié. Por las filas verdiblancas han pasado infinidad de jugadores, además de dos presidentes y dos directores deportivos. Pero lo más chocante quizá haya sido el número de entrenadores, en total, cuatro. Porque el entrenador es la base de un proyecto deportivo, y sin esa estabilidad, ¿qué proyecto es posible? Esta misma entrada la puedes leer en ondabetica.es

El Real Betis estrenaba el 2016 en casa ante un rival asequible, el Eibar. Por aquel entonces, el entrenador era Pepe Mel, quien se encontraba en su segunda etapa como técnico en el equipo verdiblanco. No pasaba por su mejor momento, siendo criticado por su falta de solidez física, algo que se estaba notando en los resultados: llevaba un mes sin conseguir una victoria.

Y Pepe Mel, el hombre de casa, el que se fue llorando la primera vez que lo echaron, quien nos llevó a Europa y nos devolvió dos veces a Primera División, decidió irse por la puerta de atrás. Pero la que había al fondo. Muy al fondo. 0-4 ante el Eibar, 0-2 en Copa frente al Sevilla, y 1-0 contra el Getafe. Así terminó la etapa de Pepe Mel.

La decepción hecha foto. Fuente: marca.com
Volvió Juan Merino a coger las riendas del equipo. La temporada pasada funcionó bien en Segunda División, consiguiendo cuatro victorias de cuatro posibles en Liga. Pero el mal momento por el que pasaba el Betis B no era un buen presagio. Por ello, el por aquel entonces director deportivo, Eduardo Maciá, intentó traer a Juande Ramos. El proyecto no convenció al manchego y Merino tomó las riendas del equipo para toda la segunda vuelta.

El equipo mejoró, tanto en físico, como en juego y, quizá lo más importante, en confianza. No fue fácil si empiezas perdiendo 4-0 frente a tu eterno rival y quedando eliminado en Copa, pero empatar ante Villarreal y Real Madrid o ganar al Valencia despejaron las dudas sobre este entrenador. Tenía coraje, ganas de levantar este equipo. Juan Merino quería ser la base del proyecto a edificar.

Todo se vino abajo. A mediados de marzo, el Betis perdió 3-1 frente al Athletic Club, un partido en el que Merino parecía haber asumido el rol de ser un equipo inferior a los leones. Tras ello, derrota ante Málaga y vergüenza ante el Atlético de Madrid. Merino cuestionado, Maciá igual, Haro y Catalán tampoco convencían. Y así, resignados a un proyecto conformista otro año más, se decidió por volver a empezar de cero.

Un hombre de casa... sin casa. Fuente: futbol.as.com
Así llegó Miguel Torrecilla, el antiguo director deportivo del Celta, que había dejado a los gallegos en puestos europeos. Y a Juan Merino, un hombre de casa, que nunca puso una pega, se le ofreció un puesto en el equipo… pero no de entrenador. Él lo rechazó prefiriendo estar en “la guerra de los banquillos”. Torrecilla, consciente de que el entrenador es lo primero, firmó a primeros de junio a Gustavo Poyet, un técnico uruguayo con experiencia en equipos de media tabla en la Premier… y poco más.

A pesar de que en pretemporada parecía que el equipo podía carburar, los peores presagios se confirmaron. Lo único positivo fue la llegada de Marcos Álvarez, preparador físico, quien puso a los jugadores en forma como para aguantar los 90 minutos si hiciera falta. Esto, con Pepe Mel, era impensable.

Derrota tras derrota, vergüenza tras vergüenza, Poyet demostró no tener ninguna idea clara de juego. Cerrado en su 4-3-3, no se daba cuenta de que no era un sistema que beneficiara al equipo. Con Rubén Castro en banda y sin libertad para Piccini o Durmisi, el equipo se venía abajo fácilmente. Y nuestro mejor organizador en el centro del campo, Dani Ceballos, pasó al ostracismo sin razón alguna.

Un uruguayo sin estilo. Fuente: sevilla.eldesmarque.com
Ángel Haro y Miguel Torrecilla reconocieron su error y, tras la derrota frente al Villarreal por 2-0, aprovecharon el parón por selecciones para, a comienzos de noviembre, destituir a Gustavo Poyet y traer a Víctor Sánchez del Amo. Este entrenador, con experiencia en Primera con el Deportivo de la Coruña, ya conocía bien la Liga, y además, parecía más preparado que muchos otros nombres que se habían barajado.

Víctor trajo un nuevo sistema al equipo, el 5-3-2. A pesar de ser una formación defensiva, y más si en el medio juegan Donk y Petros, el equipo sabe presionar, mover el balón, y llegar a portería. La carencia defensiva, sin embargo, aún sigue siendo un problema. Porque la solución no es la cantidad, sino la calidad.

La esperanza reside en él. Fuente: marca.com
Así, el Real Betis terminó el año como lo empezó: con muchas dudas y siendo eliminado bochornosamente de Copa. Quizá Víctor sea la base del proyecto que este 2016 no se ha consolidado, pero todavía falta mucho por mejorar. Esto es el Real Betis Balompié. La exigencia debe ser máxima, y el equipo también.

miércoles, 9 de noviembre de 2016

REPASO AL PRIMER TERCIO DE LA TEMPORADA: LA VIDA SIGUE IGUAL

Como dice Joaquín Sabina: “Y la vida siguió, como siguen las cosas que no tienen mucho sentido”. Así es el Betis, sin demasiado sentido. Comenzamos preparando un nuevo proyecto desde el primer segundo de la pretemporada. Director deportivo nuevo, entrenador nuevo, fichajes que llegan pronto… Todo para que el Betis siga igual, sin que nada cambie. Puedes leer esta misma entrada en ondabetica.es

El Betis comenzó su andadura por LaLiga en el Camp Nou. Quizá fuera el mejor momento para ir a este campo: cansancio por la Supercopa, muchos lesionados, y un sinfín de excusas que duraron seis minutos, cuando Arda Turan marcó el primero. El empate de Rubén daba alas para creer, pero Messi y Suárez se encargaron de cortarlas. 6-2, humillados y sin ideas.

Vaya noche nos dieron estos dos. Fuente: the guardian.com

Ahora tocaba cambiar el chip. Había que ser un fortín en casa, no se nos podían escapar los puntos del Villamarín. Nada más lejos de la realidad: empates ante Deportivo y Granada. Nos dejamos cuatro puntos muy importantes, esos que, ahora mismo, nos harían ver las cosas de otro modo.

La única buena noticia de las primeras jornadas llegó en Mestalla, ese campo donde no ganábamos dese hacía 30 años. Yo, que tengo 22, nunca me había parado a pensarlo, pero es cierto, no había visto ganar al Betis en el campo del Valencia. Rubén Castro y Joaquín, ex del Valencia, se encargaron de que aquello fuera posible. Gran partido, aunque también hubo despistes y, por tanto, mucho que mejorar.

Joaquín celebró el gol ante el Valencia. Fuente: sport.es

Derbi. La palabra que todos queremos oír. Pero, al final, la palabra maldita. Había muchísimas ganas de ver a este Betis enfrentarse al máximo rival. Fue, como todos los derbis sevillanos, un partido intenso, fuerte, de esos que siempre tienen un extra de motivación. Son algo más que tres puntos. Lástima que el árbitro decidiera entonces que los merecía más el Sevilla. Gol de Mercado, y a los pocos minutos, gol mal anulado a Álex Alegría. La vida sigue igual.

Bochornoso. Esto fue fuera de juego. Fuente: futbol.as.com

Seguimos con derbis, este de la Comunidad de Andalucía. El Málaga visitaba el Villamarín con las mismas urgencias de puntos que nosotros. Otra vez Joaquín, otra vez ante sus ex, marcó el gol, esta vez el de la victoria. Fue el mejor partido de la temporada, pero también fue un espejismo frente a todo lo que venía…

Real Sociedad, Real Madrid, Osasuna, Espanyol y Villarreal. Cinco partidos. Una victoria y cuatro derrotas. No se entiende cómo un equipo que jugó de forma intensa y con cabeza ante equipos como Valencia, Málaga o el propio Sevilla, ahora era incapaz de dar un solo pase. Lo peor de todo fue el 1-6 contra el Madrid. No se puede poner la excusa de que fue el mejor Madrid de la temporada, o que son mejores que nosotros, o que blablablá. El año pasado les sacamos un empate y debió ser victoria. Este año fue una vergüenza.

La victoria ante Osasuna, gracias a un Nauzet que se comió la falta lejana de Felipe Gutiérrez en el 91, solamente sirvió para coger aire en la clasificación y para no vernos, en este primer tercio de temporada, en los puestos de descenso.

Así lo celebró Felipe, sabiendo la importancia de esta tercera victoria. Fuente: futbol.as.com

Así, tras doce jornadas, nos encontramos con un Betis sin idea de juego, sin esquema, sin confianza y sin saber hasta cuándo durará esta agonía. Voy a terminar de la misma manera que empecé. Como dijo Joaquín Sabina, justo después de la primera cita que puse: “Una vez me contó, un amigo común, que la vio donde habita el olvido”. Que nadie se olvide de que somos el Real Betis, y esta situación no se puede permitir.

martes, 1 de noviembre de 2016

1/11/2005: CUANDO GANAMOS A LOS MEJORES

Hoy hace once años, pero el recuerdo sigue intacto. El Real Betis Balompié hizo el mejor partido que se recuerda de su historia reciente ante el todopoderoso Chelsea de José Mourinho. ¿Se podrá repetir alguna vez aquella hazaña? Tras haber vuelto a ver el partido recientemente, aquí desvelo algunas claves que nos dieron aquella victoria por 1-0. Todas las fotos son sacadas del partido, proporcionado en su totalidad por videosdelbetis.com. Esta misma entrada la podéis leer en ondabetica.es

1)      CABEZA

Este es uno de los factores más importantes en cualquier partido. Hay que creer que se puede, no amedrentarse ante nadie, ya sea el Chelsea, el Real Madrid, el Barcelona o el Sevilla. Nosotros somos también un equipo con mucha historia, aunque nuestro palmarés no sea tan amplio. Este sentimiento se puede ver reflejado en varias jugadas durante el partido, por ejemplo, cuando a Dani le hacen falta, pero en vez de quedarse en el suelo y quejarse, se levanta rápido a recuperar el balón.
Del mismo modo, no hay que confiarse nunca. Da igual que sea el colista de la liga, o incluso un club de Segunda División B. Cada partido es un mundo y todos hay que prepararlos con la misma intensidad. No podemos pensar que, por estar ante un rival inferior, será muy fácil. Esto le pasó a Robben en varias jugadas, quien intentó irse de varios rivales a la vez, saliendo mal parado.

Robben intentando irse de cuatro jugadores. Es Rivera quien le quita la pelota.

2)      CORAZÓN

No hay nada más bonito que jugar en el equipo de tus sueños, ese que sientes por encima de cualquier otro. Jugar con corazón da un plus de calidad a todos aquellos jugadores que son capaces de sentir el escudo que llevan en el pecho. Así, podemos ver en la alineación de aquel partido hasta seis canteranos (Varela, Juanito, Melli, Arzu, Capi y Joaquín) además de la entrada de Dani desde el banquillo. Sin olvidar tampoco el compromiso incuestionable de Contreras, Rivera, Edu, Oliveira y Fernando, todo ello sumado a dos defensas que dejaron buenas sensaciones como son Nano y Castellini. Como se puede ver, un equipo muy completo y fiel al compromiso bético.

Alineación titular, en la cual vemos a seis canteranos del Real Betis.

3)      SOBREPONERSE A LAS ADVERSIDADES 

¿Cuántas veces nos ha pasado que, después de llevar una semana esperando al partido, los rivales nos meten un gol a los cinco minutos? A partir de ahí, el partido cambia, y aunque queden 85 minutos por delante, el juego ya no es el mismo.
Afortunadamente, el Chelsea no nos marcó a los cinco minutos (ni a los noventa), pero sí tuvimos otras adversidades. Y es que en el minuto 25 ya habíamos realizado dos cambios por lesión (salieron Nano y Oliveira por Castellini y Dani). Habían sido unos primeros minutos magníficos, pero estos dos reveses no parecían ser fáciles de superar. O sí, puesto que en el minuto 27 llegó el gol.

Aquí se llevan a Oliveira en camilla. La cosa pintaba muy fea.

4)      IDEA CLARA DE JUEGO

Para saber jugar al fútbol no basta con tener buen regate, hay que saber jugar en equipo, y con las ideas muy claras. Pudimos ver durante todo el tiempo cómo quería jugar Serra Ferrer. Presión constante, rápida recuperación de balón, y calma. Juego de toque y movimiento de balón de una zona a otra. El Chelsea acabó mareado. El único punto en contra aquí eran los balones en largo de Contreras, ya que casi no ganamos ningún balón aéreo y siempre empezaba a jugar el equipo londinense.

Dato de la posesión (54% - 46%) en favor del Betis debido a su buen juego.

5)      PACIENCIA... Y PICARDÍA

Esta es la parte sucia del fútbol, pero también necesaria si queremos ganar a un equipo con un presupuesto diez veces mayor que el tuyo. La paciencia se notó a la hora de tocar el balón, así, tras muchos pases fue como llegó el gol.
En cuanto a la picardía, pues no es bonito tener que recurrir a ella, pero en los últimos minutos, con un Chelsea echado hacia arriba (Terry acabó jugando de delantero centro) había que tirar de ella en algún saque de puerta o de banda.

6)      SUERTE

Absolutamente imprescindible. Sin un poco de suerte no hubiéramos ganado este partido. En el minuto 43, Gudjohnsen se quedó solo ante Contreras, pero el balón le votó mal y el balón se fue por encima del larguero. En el minuto 71, la pelota se paseó por la línea de gol, dando en los dos palos y saliendo rechazada hacia las manos de nuestro portero. Y en el minuto 77, el Chelsea llegó a marcar gol, pero la jugada venía precedida de una falta que vio bien el árbitro. Fueron las tres ocasiones más claras de los de Mourinho, y en cada una de ellas, a cada bético se le encogió el corazón por un instante. «¡Qué suerte!» dijimos más de uno.

Momento en el que el balón da en el segundo palo antes de que salga hacia fuera de la portería.

7)      AFICIÓN

Este es el apartado que nunca falla. La afición siempre estará ahí, llenando el estadio y cantando hasta que nos quedemos sin aliento. Sin embargo, es increíble cómo se vivió en aquel partido, siendo claramente un jugador más. En el minuto 43, Arzu no se da cuenta de que viene un defensor a por él mientras conducía el balón. En ese momento se escuchó un claro «¡Cuidado!» que le alertó y pudo pasarla antes de perder el balón. Y así, con aplausos en el descanso y cantando aquel «Rivera selección», cosa que se cumplió, fue una noche mágica para todo el Real Betis Balompié.

La afición enloqueció, y el mundo del fútbol con ella.

martes, 7 de junio de 2016

¿SE PUEDE COMPETIR ANTE LOS GRANDES EQUIPOS?

Esta entrada va dedicada a todos aquellos que piensan que es mejor rendirse directamente ante Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid; para aquellos que venden su abono en estos partidos; para todos aquellos que no creen en el Real Betis Balompié.

1)      LO QUE NO HAY QUE HACER

En este partido se dieron todos los factores en contra para izar la bandera blanca desde el principio. Y nunca mejor dicho. “Venía de empatar, va a querer ganar seguro”. “Hemos hecho muchos fichajes, estamos en periodo de prueba”. “Contra el Real Madrid no vamos a sacar nada”. Pero la peor de todas, sin duda: “Somos un recién ascendido, no podemos hacer nada”. Pues una semana antes el Sporting mantuvo su portería a cero.
Pepe Mel dispuso una alineación en pruebas, con Molinero en la izquierda, Vargas en el extremo, Xavi Torres de titular, Pezzella sin ritmo, y ningún intento de ir a por el partido. Así, habían pasado dos minutos cuando ya íbamos perdiendo.
Con este partido se reivindicaban jugadores como James o Bale, y sobre todo, el entrenador Benítez, que llegó ofreciendo más dudas que soluciones al Real Madrid. 5-0. Un gol de falta casi sin ángulo, otro de chilena, otro desde fuera del área, y dos cabezazos a bocajarro. Adán tan solo pudo parar a Cristiano Ronaldo. Y el Real Betis aprendió todo lo que no tiene que hacer.

2)      LA SUERTE NO VALE POR SÍ SOLA

El partido ante el Atlético Madrid en el Benito Villamarín se produjo el día 22 de noviembre, el cual será recordado como el de una de las mayores fortunas para los verdiblancos. Perder solo por 0-1 fue de agradecer. El Atleti dispuso de bastantes ocasiones como para habernos endosado otra manita o más. Pero las ocasiones se las dimos nosotros. Concretamente, la defensa.
Otra vez recibimos gol en contra nada más empezar el partido. Al parecer, no aprendimos de la visita al Bernabéu. Error de Xavi Torres (y de Pepe Mel por seguir confiando en él), chut de Torres, la para Adán, y el rebote para el más listo de la clase: Koke. Ningún defensa es capaz de despejar el balón, y eso que todos estaban más cerca al balón en el rebote. 0-1 y otra vez a remar.
Los disparos de Griezmann y Carrasco fuera de los tres palos salvaron a un Betis sin pena ni gloria. Solo un muy buen tiro de Cejudo dio algo de esperanzas nada más comenzar el segundo tiempo, pero Oblak ha sido el Zamora por paradas como la que hizo en nuestro campo. Tuvimos suerte de perder por poco, pero sin una solidez defensiva, nada se puede hacer.



  









Fuente: www.ondabetica.es


3)  AYÚDAME A MANTENERME CONCENTRADO

Los primeros 30 minutos ante el Barcelona en el Camp Nou fueron bastante buenos. Habíamos aprendido de errores pasados: Petros y N’Diaye consolidados junto con Ceballos y Cejudo, dos delanteros en vez de uno, una línea defensiva mejorada… Pero no era nuestro partido, sino el del Barça. Tras ganar el Mundial de Clubes y hacerle el pasillo, además de ser el partido 500 de Messi, todo parecía indicar fiesta azulgrana. Y así se hizo.
Penalti totalmente inventado a favor del Barcelona. Pepe Mel expulsado por protestar. Neymar le da al balón con los dos pies (ilegal). Falla el penalti, y en el rebote Rakitic da una patada a Westermann que hace que el alemán meta el balón en su propia portería, además de lesionarse. Ante esta situación, se hizo añicos la concentración de los primeros minutos. El partido pasó a merced del Barcelona.
Gol de Messi al poco de encajar el primero el Betis. En la segunda parte, error de N’Diaye nada más empezar (único en la temporada, mejor que fuera en este momento que no en uno de mayor relevancia) y gol de Suárez, quien haría su doblete tras un tacón magistral de Neymar. La MSN en su mayor esplendor. Resultado también corto debido a los palos y a algunas paradas de Adán. Lástima que empezáramos tan bien para acabar tan mal. Lástima que, para los árbitros, no debía ser la noche del Real Betis.

4)      Y ENTONCES LLEGÓ CEJUDO

Muchos cambios en los dos equipos tras 19 jornadas. Lo primero, los banquillos: Benítez y Mel eran historia, dando paso a Zidane y Merino, respectivamente. De nuevo, otro partido en el que la situación era favorable a nuestro rival. Nuevo entrenador, nuevas ilusiones, y enfrente, un Real Betis que llevaba siete jornadas sin marcar. Nada de eso importa cuando el equipo está donde debe estar: en el terreno de juego.
Minuto 7. Tiro de Rubén Castro. Otra vez Keylor Navas. Controla Fabián, cómo le combate en el cuerpo a cuerpo a Pepe. Cejudo engancha una volea perfecta. Absolutamente perfecta. Brillante. Imparable. Gol. El Betis está ganando al mismo equipo que en la ida se lo comió.
A partir de ahí, había que demostrar lo aprendido en el pasado. Solidez defensiva ante todo. Cristiano Ronaldo disfrutó de ocasiones, pero no de goles. El Real Madrid llegaba pero no podía. Penalti no pitado a su favor. Vaya, hay que regalarles algo.
Porque en la segunda parte, con un Real Madrid más enchufado gracias a Modric, llegó el gol. Hubo que esperar 71 minutos, y también hubo que darle las gracias al asistente por no haber visto, o no haber querido ver, a James en fuera de juego. Gol de Benzema que no debió subir al marcador. Tras ello, penalti no pitado a favor del Betis para equilibrar la balanza.
Al final, un empate que incluso sabe a poco. Rubén Castro tuvo la última pero se fue fuera. Ni efecto Zidane ni nada. El Real Betis Balompié fue capaz de plantar cara.













Fuente: www.marca.com 

5)      ¿NO ES NUESTRA LIGA?

El partido ante el Atlético de Madrid en el Calderón estaba siendo muy tranquilo. 30 minutos y sin sobresaltos. Y, de repente, gol de Torres como en la Eurocopa 2008, seguido de un gol de Griezmann a los 5 minutos con fallo de Adán incluido. Un pequeño despiste, y el Atleti te marca dos goles.
No valen las pruebas, eso está claro. Con Bruno al banquillo, Molinero en la derecha y Montoya en la izquierda, además de Ceballos al medio en detrimento de Petros, estábamos ante un Betis desconocido. Poco se puede añadir.
El Atlético de Madrid vivió una tarde placentera llena de anécdotas. Gol de Juanfran, fallo de Oblak para que marque el gol de la honra Rubén Castro, doblete de Griezmann, gol de Thomas y fin del partido. ¿Cuál es la excusa, que no es nuestra liga? A ver, es cierto que en la jornada 31 los objetivos de Atlético de Madrid y Real Betis no suelen ser los mismos, pero los tres puntos que ellos ganaron, nosotros no. Así que sí, el Atlético de Madrid está en nuestra liga, y este pasotismo no se debería haber permitido.

6)      Y EL BETIS DECIDIÓ LA LIGA

Comenzó el partido como tenía que hacerlo: dominando el Betis. Sin miedo. Chut de Rubén Castro desde fuera del área que no encuentra portería. Tras ello, buen cabezazo de Bruno que salva Claudio Bravo. Se avecinaba un efecto Zidane 2.0. Hasta que Westermann decidió echar por tierra su penúltima oportunidad como bético en siete minutos. Con un jugador menos y toda la segunda parte por delante.
No era la primera vez que nos veíamos en esa situación. Conseguimos ganar a la Real Sociedad y empatar en Mestalla con 10 jugadores, pero aquí no se iba a dar el caso. Adán y Pezzella no se entienden, error de ambos, y gol del Barça. La Liga se podría haber decidido en el Villamarín, pero no fue así. Además, Messi, que retrasó su posición, se dedicó a dar pases hasta volver locos a la defensa bética, uno de ellos para que Suárez marcara el segundo y sentenciara el partido. Una pena, ya que se trabajó mucho en ese partido y no se consiguió ningún punto.

CONCLUSIÓN: ¿SE PUEDE COMPETIR ANTE LOS GRANDES?

La respuesta es sencilla: por supuesto que se puede. Pero hay determinados factores que deben ser tenidos en cuenta en este tipo de partidos. La concentración de principio a fin, la solidez defensiva, y sí, algo de suerte. Pero, sobre todo, saber que se puede ganar a los equipos grandes. Que no tenemos que asustarnos por sus millones ni por sus títulos. Somos el Real Betis Balompié, y podemos con todo lo que se nos eche encima.














Fuente: www.videosdelbetis.com

domingo, 29 de mayo de 2016

LA SELECCIÓN ESPAÑOLA OS ESPERA

Ahora que va a comenzar la Eurocopa, es adecuado hablar de  jugadores béticos que han dado un rendimiento fantástico. No es tontería pensar que en un futuro puedan vestir la camiseta de la selección española absoluta. En concreto, son tres los jugadores que, en mi opinión, están –o deberían estar–, en la lista de futuribles de nuestro país.

1)      Antonio Adán: el relevo natural de Casillas

No se puede dudar del rendimiento del portero titular a lo largo de la temporada. A pesar de haber encajado 50 goles esta liga, ha sido el mayor pilar del equipo junto a Rubén Castro.
Sus paradas han salvado partidos que se podrían haber complicado muchísimo. Es imposible olvidar cómo supo aguantar el partido de ida contra el Valencia, con resultado final de 0-0 jugando con uno menos, o el pase en largo que le dio a Rubén Castro frente al Sporting para remontar el partido, con el marcador de 1-2. Pero, sin duda, tuvo un gran día frente al Real Madrid en el partido de vuelta, donde paró todo lo que le dejaron. El gol de los blancos fue en fuera de juego, donde no pudo hacer nada, aunque sí hizo ante un tiro de James fuera del área, o la majestuosa mano izquierda ante Benzema en el área pequeña.

A favor: su constancia, sus reflejos, saber salir en el momento adecuado tanto para alcanzar el balón en el aire como para achicar espacios, realizar las paradas de la forma más precisa posible.
En contra: su juego de pies no es bueno. Muchas veces manda balones fuera de banda desde un saque en largo. Por ello, no juega demasiado al balón con los pies, prefiriendo pases en largo. Tampoco ayuda que en la selección los puestos de portero estén fijos desde hace bastante tiempo, sin posibilidad de obtener una oportunidad.


Fuente de la foto: antonioadan.es

2)      Me llamo Bruno, pero podéis llamarme Juanito

Los centrales en la selección española escasean. Bien es cierto que Sergio Ramos y Piqué son los mejores y que aún les queda cuerda. Pero no hay mucha vida más allá de ellos dos. Por ello, la temporada de Bruno hace pensar que podría vestir la camiseta de la selección en un futuro, tal como lo hizo Juanito para convertirse en campeón de Europa en el año 2008.
La defensa del Real Betis es siempre un problema, ya que el rendimiento de los jugadores es una montaña rusa. El ejemplo de ello está en todos los jugadores de esta línea que han jugado esta temporada: Piccini se lesionó, Westermann y Vargas no han terminado de la mejor manera, Pezzella tuvo un periodo de adaptación más largo de lo que debiera… Pero Bruno ha sabido mantenerse ahí desde el principio.

A favor: sabe mover a la defensa, salir cuando debe hacerlo, achicar espacios, despejar tanto de cabeza como con los pies hacia el lugar que debe, y no se arruga frente a ningún reto. Es un gran rematador en los saques de esquina y ha demostrado que puede jugar tanto de central derecho como de izquierdo, incluso ha hecho funciones de lateral derecho cumpliendo a la perfección.
En contra: le falta experiencia en Primera División. Ha sido un buen año para él pero aún debe mejorar algo más para demostrar que tiene calidad para la Selección Española y para ser el pilar de la defensa bética.















Fuente de la foto: canariasenhora.com


3)      Se busca hueco para Dani Ceballos

Con tan solo 19 años, Dani Ceballos se ha convertido en una de las mayores promesas del fútbol español. Ya el año pasado se lo rifaban grandes equipos, finalizando todo con una renovación que se hizo de esperar.

A favor: su visión de juego, su creatividad, sin arrugarse ante nadie y asumiendo el papel de llevar la batuta del equipo bético. Es rápido cuando hace falta y más tranquilo cuando hay que ponerle pausa al juego. Sabe dar grandes asistencias y colocarse en el lugar exacto, siendo también un gran goleador. Además, su edad hace pensar que aún le queda mucho por mejorar.
En contra: su carácter le falla, saliéndose del partido y entrando en trifulcas en las que no debería. Muchos árbitros le han cogido la matrícula, aunque quizá de forma algo injusta. No es muy constante en el juego, haciendo bien un partido sí y uno no. Aún no tiene definida cuál es su posición ideal: mediocentro, interior o mediapunta.


















Fuente de la foto: betisweb.com

Extra) España siempre estará en deuda con Rubén Castro

El titular lo dice todo. Rubén ya tiene 35 años y quizá esta era su última oportunidad de vestir la Roja. Pero no estará en la Eurocopa. El mayor goleador de la historia del Betis, el que más puntos ha dado a un equipo, el que ha conseguido que hayamos terminado entre los diez primeros esta temporada, nunca llevará la camiseta de la Selección.

Es lógico pensar que, si el año en que el Betis entró en Europa League, Rubén Castro no fue con la selección, menos lo iba a ser este año. Lo cierto es que debería haber ido en ambas ocasiones, y por tanto, que el fútbol siempre le deberá una a nuestro máximo goleador. Esperemos que el próximo seleccionador aprenda de los errores…













Fuente de la foto: fichajes.net